Universitarios anunciaron un paro y movilización contra el veto de Javier Milei al aumento de fondos
La semana pasada el Senado aprobó la ley de Financiamiento Universitario. Horas más tarde el Presidente anunció que dejaría eso sin efecto para alcanzar el “equilibrio fiscal” que persigue su gobierno.
La Federación Universitaria Argentina (FUA), rectores y docentes universitarios anunciaron esta tarde un paro total de actividades en las universidades de todo el país para el próximo jueves 26 de septiembre como respuesta al veto del presidente Javier Milei a la ley de financiación educativa del nivel superior que aprobó el Senado la semana pasada.
“VETO TOTAL”, escribió el libertario en su cuenta de la red social X, en respuesta a una publicación del subsecretario de Políticas Universitarias de la Nación, Alejandro Álvarez, que explicaba que “la última palabra sobre el veto la tiene el presidente”. Luego sumó otras publicaciones en la misma red social, en la que distintos usuarios celebraban el anuncio del veto, ya que esto permitiría priorizar el “equilibrio fiscal”.
Tras una sesión que se alargó unas cinco horas, la Cámara Alta aprobó con 57 votos afirmativos, 10 negativos y una abstención la ley de Financiamiento Universitario, ratificando así la decisión que, en agosto pasado, había tomado la Cámara de Diputados.
No obstante, y como ya ocurrió con el proyecto de ley de reforma jubilatoria, puede vetarse por el mandatario, ya que la Constitución habilita al presidente a vetar total o parcialmente una ley, veto que el Parlamento puede superar volviendo a someter a votación el proyecto y obteniendo el voto afirmativo de al menos dos tercios de ambas cámaras legislativas.
El jefe de Gabinete del Gobierno argentino, Guillermo Francos, reiteró la semana pasada que se vetará toda ley que comprometa el objetivo del equilibrio fiscal, meta de Milei desde que asumió la Presidencia, el 10 de diciembre de 2023.
El proyecto de ley aprobado aumenta los fondos destinados a las universidades nacionales, tanto para gastos de funcionamiento como para salarios de profesores y personal no docente, tomando en consideración el índice de inflación e impulsando un mecanismo para la recomposición de los sueldos.
Según cifras facilitadas por el Consejo Superior de la UBA, los salarios de los docentes universitarios han perdido, en promedio, entre un 35 y un 55 % de su poder adquisitivo en los últimos ocho meses.
El jueves, además, con motivo del inicio de la sesión ordinaria del Senado que debatió varios asuntos y que, por eso, se extendió hasta altas horas de la madrugada del viernes, la convocatoria de la Federación Nacional de Docentes Universitarios (Condau) se movilizó hasta el Parlamento para reclamar los derechos de los profesores.
23 de abril, un antecedente sin precedentes
Cerca de medio millón de ciudadanos -estudiantes, docentes, personal universitario, además de sindicatos, políticos y organizaciones sociales-se manifestaron el 23 de abril en la Marcha Federal Universitaria por las calles de todo el país en defensa de la educación superior pública y contra las políticas del Ejecutivo en ese ámbito.
Las cifras estimadas variaron entre los 100.000 manifestantes que, según las fuerzas de seguridad, se concentraron en la Plaza de Mayo -donde se ubica la Casa Rosada (sede de Gobierno) y donde concluyó la marcha de Buenos Aires, con la lectura de un comunicado- y los 800.000 que valoró la Universidad de Buenos Aires (UBA), que elevó a un millón de personas la participación en todo el país.
Aquel día parte de la sociedad se reunió para defender la educación pública ante las políticas de ajuste del Gobierno de Milei.
MM con información de agencias.
