El presidente de Toyota prevé una «recuperación del mercado a partir de abril»
El presidente de Toyota Argentina, Gustavo Salinas, afirmó que el Bopreal que lanzó el Banco Central para normalizar el flujo de operaciones con el exterior «dio un poco de aire» a las terminales automotrices, y que de mediar el reacomodamiento de algunas variables de la economía podría esperarse hacia abril una recuperación del mercado.
En una entrevista con Télam en el marco del inicio de producción del nuevo utilitario Hiace, en la planta bonaerense de Zárate, Salinas consideró que 2024 tendrá un escenario inferior en producción, ventas y exportaciones respecto del año pasado, luego de un enero que registró una caída del 33% de los patentamientos y del 16% en la producción.
Toyota finalizó 2023 como la marca de mayor producción, ventas locales, y exportaciones, y el lanzamiento de su tercer modelo -luego de la Hilux y la SW4- marca un hito de la presencia en el país. Los siguientes son los tramos principales de la charla.
– ¿Este tercer modelo en producción cómo se incorpora a los objetivos de la marca para 2024 ?
– Seguimos manteniendo tres turnos de producción a capacidad plena. Estamos con desafíos en algunos mercados de exportación, fundamentalmente en la región. Hay algunos mercados que están teniendo una disminución en su nivel de actividad, básicamente diría Colombia y Chile, pero igualmente vamos a mantener los tres turnos fabricando en el mercado argentino. Seguimos manteniendo nuestro plan de de ventas y producción originalmente estimado para el año 2024 y si bien va a ser un año desafiante, confiamos en que vamos a poder realmente tener nuevamente un buen resultado. Quizás inicialmente no se repitan los números del año pasado que terminamos con más de 180.000 unidades de producción, sino que estaría por debajo de eso, probablemente cercano a las 160, 165.000 unidades, pero tenemos la capacidad para poder de alguna manera incrementarlo si la demanda en estos destinos de exportación se recuperara.
– ¿Y cuál es la proyección para el mercado en general?
– Estamos viendo un mercado que va a ser inferior a 2023, eso está claro, pero confiado de que mes a mes se va a ir recuperando y que va a ir creciendo. Pensamos que tenemos una expectativa a partir del mes de abril de recuperación del mercado, sobre todo para el mercado de las pick ups, y con lo que va a ser el nivel de actividad fundamentalmente en el agro, va a contribuir a sostener una demanda. Sería bastante importante.
– El inicio de año llegó con un fuerte movimiento de variables macroeconómicas, ¿Cómo analizan estas primeras medidas de gobierno?
– Las decisiones que tomamos en Toyota permanentemente tienen siempre una perspectiva de largo plazo. Pero lograr una estabilización de la macro y una situación económica más estable es fundamental para nuestra operación, y nuestras grandes decisiones estratégicas de largo plazo y lo que estamos preparando para los años siguientes están siempre con una visión optimista hacia la Argentina y hacia la región. Más del 80% de nuestra producción se destina a los mercados latinoamericanos y en ese sentido, somos optimistas en que tanto los modelos que estamos presentando, como nuestros planes de producción, van a traer sustentabilidad a esa visión. Volviendo a la coyuntura, todas las decisiones que apunten a fomentar la producción, el empleo, la estabilización de la macroeconomía, bienvenido sea. Y esperemos ir viendo que mes a mes eso se vaya de alguna manera logrando.
– ¿La participación de Toyota en el Bopreal alivió la deuda comercial de la empresa ? ¿ Recibieron positivamente este instrumento?
– Si tomamos en cuenta la participación de Toyota en la industria automotriz, realmente muy significativa a nivel de producción y de comercialización, obviamente en consistencia con eso estaba nuestro nivel de endeudamiento comercial que se había generado durante el año pasado. Ante esa situación y viendo las herramientas que estaban disponibles y a partir de un análisis muy profundo con la casa matriz, tomamos la decisión de suscribir el Bopreal como una manera de resolver nuestro problema de endeudamiento y apostando a la confianza en la Argentina y en el futuro. Es un tema que es un primer inicio para transitar a normalizar esa deuda comercial que es fundamental, sobre todo para poder continuar con las inversiones en el futuro, que es uno de los objetivos en el corto y mediano plazo.
– ¿Vinculado a esa situación, qué tan comprometida está la provisión de autopartes para las operaciones de la planta de Zárate?
– Venimos trabajando muy de cerca con toda la red de proveedores. Cada uno tiene una situación distinta, tenemos proveedores locales e internacionales, y por supuesto con grandes desafíos todos. Básicamente en términos de lo que es endeudamiento comercial, a similitud de lo que nos ha pasado a nosotros. Ahí cada empresa tiene su política y su estrategia, pero hemos ido trabajando con todos para poder sostener el suministro de piezas. Hasta ahora no hemos tenido que parar la producción por falta de partes, pero por supuesto es un trabajo diario que hacemos con cada uno de ellos para asegurarnos que estén las condiciones de poder continuar produciendo normalmente.
– ¿Se puede decir que se está normalizando… ?
– Hubo un hecho importante que es comenzar a regularizar el flujo de nuevas operaciones con los pagos, si bien todavía en un esquema un poco extendido en el tiempo, ha permitido dar un poco de aire, sobre todo a los acreedores del exterior y comenzar a generar de alguna manera el pago ya más regular de piezas. Eso creo que que ha ayudado, ha sido necesario. Todavía no es suficiente para normalizar completamente la situación, pero hoy estamos en una situación muy diferente a la que estábamos a principio de enero.
– ¿Esta coyuntura demora el intercambio con el gobierno del resto de los temas clave que tiene pendientes la industria ?
– La industria es un conjunto. Tenemos que pensar en tecnología nueva, todo lo que es la electrificación de vehículos, nuevos modelos, introducir al país en el futuro y para eso es fundamental mantener el diálogo de la industria con el sector público, acordar políticas que apunten a generar producción, exportación y empleo. Y para eso tenemos que tener ese diálogo con mirada estratégica. Es fundamental para la Argentina estar en sintonía con lo que está transitando la industria a nivel mundial, que es este proceso de transformación en varios campos. Uno de ellos es todo lo que tiene que ver con la movilidad sustentable y necesitamos tener reglas claras mirando a futuro para que se puedan desarrollar las inversiones a largo plazo en concordancia con esa normativa.
El utilitario Hiace es el primer modelo bajo el régimen IKD y que hasta hoy se importaba de Japón
El inicio de producción del nuevo utilitario Hiace, en la planta de Toyota de la localidad bonaerense de Zárate, marcó la concreción de la primera inversión bajo el régimen de importación de vehículos incompletos (IHK) que permite el montaje local de autos, camiones o vehículos comerciales.
El sistema IKD es similar al que ya se viene desarrollando en la industria de los motovehículos, y en el caso de los automóviles y utilitarios requiere de las empresas una integración inicial de componentes locales del 10% en los primeros dos años, que se incrementa a 12% y 15% en el cuarto y quinto año.
Con una inversión de US$ 50 millones en un predio lindero a la planta histórica de la marca japonesa en Zárate, Toyota es la primera en concretar el ensamblado de un vehículo con esta modalidad con la producción de dos modelos del utilitario Hiace que hasta hoy se importaban de Japón.
Salinas explicó que allí «hace más de 25 años se comenzó a producir la pickup Hilux y después produciendo la SW4, siempre con un crecimiento constante y pensando no solo en el mercado doméstico sino también en el mercado regional de exportación».
«En ese momento empezamos con un volumen cercano a las 10.000 unidades y el año pasado llegamos a producir más de 180.000. Hiace le da continuidad a eso porque utiliza de alguna manera y optimiza muchos de los componentes con los cuales fabricamos Hilux, que pasan a ser también parte de la nueva Van»; explicó Salinas.
El nuevo utilitario va a empezar con un volumen inicialmente cercano a las 4000 unidades anuales, pero también con la expectativa de que vaya creciendo en el mercado doméstico y a futuro en la exportación comenzando a fines de año a Brasil y luego ir viendo los destinos que ya llega Hilux.
«Si todo funciona bien, la idea es hacer un recorrido similar a lo que hizo Hilux» que a fines de 2023 alcanzó los dos millones de unidades producidas y la apertura de 27 mercados de exportación.
Nacido bajo el régimen IKD, el modelo Hiace «se está produciendo con un contenido local de entre el 12 y el 16%, inicialmente, están trabajando 13 proveedores de la Argentina y cuatro de Brasil, suministrando partes para lo que es este vehículo alcanzando los 110 componentes locales», precisó Salinas.
«Vamos a seguir optimizando muchos componentes con la pickup Hilux: motor, transmisión, eje trasero que se producen acá en la Argentina, y que van a suministrarse tanto para la pickup como para Hiace», agregó el directivo.
La idea es ir incrementando el nivel de localización con el acompañamiento de los proveedores que tiene Toyota en el país y en la región de igual forma que se ha hecho en la pick up a lo largo de los años.